http://losotrosvampiros.blogspot.com
Significado del nombre "Drácula".
Quizás el nombre de las cosas condicionan su naturaleza, y no al revés, como sugiere la liturgia académica.
¿Pero qué sucede con el nombre de las personas?
Significado y significante a menudo se confunden, en especial cuando investigamos el nombre de alguna personalidad particularmente abominable.
Drácula -el Drácula real- no se daba por aludido bajo este epíteto ofídico, aunque sería difícil determinar algún nombre con certeza más allá del "Vlad" inicial.
La palabra "Drácula" deriva del rumano Dracul, y éste a su vez del latín Draco, "dragón". El nombre oficial de aquel audaz y sangriento príncipe de Valaquia era Vlad Draculea, es decir, Vlad "hijo del Dragón".
Su padre, Vlad II, fue admitido en la Orden del Dragón, creada en 1428 por Segismundo de Luxemburgo, rey de Hungría. Esta admisión le ganó el sobrenombre de Vlad Dracul. En consecuencia, el viejo Vlad comenzó a usar la imagen del dragón en sus banderas, escudos y en cuanto sitio le era permitido.
Su pasado, lleno de hazañas contra los otomanos, le habían ganado fama de héroe, pero también de asesino feroz e implacable. La gente del pueblo, atenta a las imágenes e iconografías de la iglesia, identificó rápidamente al dragón heráldico de Vlad con el demonio; razón por la cual se lo comenzó a ver como un ente indefinido en términos de moral.
Cuando el joven Vlad III -nuestro Drácula- llegó al principado de Valaquia, el nombre Dracul ya estaba impregnado de horror y espanto.
Ya de pequeño mostró una inclinación por lo macabro, torturando animales y aves con los que practicaba experimentos abominables. En 1444, cuando Drácula contaba con apenas 13 años, fue entregado por su padre al Sultán en muestra de sumisión. Tanto él como su hermano, Radu, fueron criados por Mehmet II, es decir, en la corte del enemigo.
Fue recién al retornar del exilio cuando comprendió el verdadero doble sentido de su nombre: dragón por un lado, esto es, una criatura sobrenatural que corresponde a la tierra y las profundidades, y el demonio, ente que no necesita mayores precisiones.
Su padre había muerto en 1447, y su segundo hermano, Mircea, había sido enterrado vivo con los ojos perforados por dos hierros al rojo.
Casi todos los historiadores coinciden en afirmar que Drácula significa "Dragón", acaso sin entender que el pueblo, ignorante de los academicismos etimológicos, dotó a ese nombre con una cualidad profética, demoníaca, más acorde a las desmesuras de la venganza que el joven Vlad ya tenía en mente.
Lord Aelfwine.
http://losotrosvampiros.blogspot.com
viernes, mayo 25
http://losotrosvampiros.blogspot.com
El vampiro del castillo de Elizabeth Bathory.
Existe una leyenda macabra alrededor del castillo de Elizabeth Bathory en Eslovaquia.
Csejte vára, el castillo donde Elizabeth Bathory realizó sus torturas más conocidas, se ubica sobre una colina que domina la aldea de Cachtice. Hoy en día el lugar se encuentra preservado por las autoridades a causa de una prolífica cantidad de plantas exóticas. Algunos conjeturan que Elizabeth Bathory, siempre atenta a las propiedades narcóticas de hierbas y plantas, hizo que la colina donde descansa su castillo fuese sembrada con incontables plantas y raíces traídas del extranjero.
El palacio no sólo fue la residencia oficial de Elizabeth Bathory, sino también su prisión.
El castillo fue construido a mediados del siglo XIII por Kazimir, convirtiéndose rápidamente en un punto estratégico para acceder a Moravia. Su propiedad pasó luego a Matúš Csák, de la familia Stibor, y recién entonces a Elizabeth Bathory, la condesa sangrienta, como regalo de bodas en 1575.
En 1708 el castillo fue capturado por un grupo de insurgentes que pedían la cabeza de Ferenc II Rákoci. Desde entonces ha permanecido deshabitado.
La leyenda que mencionamos anteriormente nos ubica en 1922.
El director de cine alemán W.F. Murnau consiguió una autorización del gobierno para filmar su película más famosa: Noseferatu, una sinfonía de horror (Nosferatu, eine Symphonie des Grauens). La viuda de Bram Stoker se negó a permitir que el alemán utilice el nombre "Drácula" como título del abominable vampiro del film. Como respuesta, W.F. Murnau se despegó de la novela casi por completo, despreciando Transilvania como locación principal, y eligió nada menos que el castillo de Elizabeth Bathory como palacio de su Nosferatu.
La producción comenzó con éxito, pero tanto el equipo de filmación como los actores pronto comenzaron a notar ciertas "discrepancias" en la arquitectura del castillo. Paredes inquietas, ventanas obturadas como por arte de magia, pasos en sitios donde no había nadie, y toda una serie de escalofriantes rumores se apoderaron del set.
Hasta aquí no nay nada que no pueda hallarse en un castillo abandonado, es decir, cuestiones ligadas a la sujestión lógica de un lugar en donde se produjeron hechos siniestros. Pero estos testimonios luego serían avalados por una serie de estudios en los que se probó que el castillo de Elizabeth Bathory, acaso luego de su reclusión, fue modificado en algunos sectores con muros deslizantes y ventanas que cambiaban su morfología, permitiéndole a la condesa sangrienta salir de los aposentos que le servían de prisión.
Los rumores crecieron cuando un grupo de actores y extras, gitanos y zíngaros en su mayoría, declaró haber visto la silueta fantasmagórica de una mujer flotando sobre las frías losas de los pasillos, con el rostro lívido y una boca descoyuntada que parecía anunciar los horrores más negros del infierno.
No existen documentos fotográficos ni fílmicos de aquel suceso paranormal. Sólo nos queda el rostro tétrico de Max Schreck, actor que interpretó al conde Orlock en la película, quien, según se cree, basó su gestualidad de ultratumba en la visión de aquel innombrable espectro.
http://losotrosvampiros.blogspot.com
El vampiro del castillo de Elizabeth Bathory.
Existe una leyenda macabra alrededor del castillo de Elizabeth Bathory en Eslovaquia.
Csejte vára, el castillo donde Elizabeth Bathory realizó sus torturas más conocidas, se ubica sobre una colina que domina la aldea de Cachtice. Hoy en día el lugar se encuentra preservado por las autoridades a causa de una prolífica cantidad de plantas exóticas. Algunos conjeturan que Elizabeth Bathory, siempre atenta a las propiedades narcóticas de hierbas y plantas, hizo que la colina donde descansa su castillo fuese sembrada con incontables plantas y raíces traídas del extranjero.
El palacio no sólo fue la residencia oficial de Elizabeth Bathory, sino también su prisión.
El castillo fue construido a mediados del siglo XIII por Kazimir, convirtiéndose rápidamente en un punto estratégico para acceder a Moravia. Su propiedad pasó luego a Matúš Csák, de la familia Stibor, y recién entonces a Elizabeth Bathory, la condesa sangrienta, como regalo de bodas en 1575.
En 1708 el castillo fue capturado por un grupo de insurgentes que pedían la cabeza de Ferenc II Rákoci. Desde entonces ha permanecido deshabitado.
La leyenda que mencionamos anteriormente nos ubica en 1922.
El director de cine alemán W.F. Murnau consiguió una autorización del gobierno para filmar su película más famosa: Noseferatu, una sinfonía de horror (Nosferatu, eine Symphonie des Grauens). La viuda de Bram Stoker se negó a permitir que el alemán utilice el nombre "Drácula" como título del abominable vampiro del film. Como respuesta, W.F. Murnau se despegó de la novela casi por completo, despreciando Transilvania como locación principal, y eligió nada menos que el castillo de Elizabeth Bathory como palacio de su Nosferatu.
La producción comenzó con éxito, pero tanto el equipo de filmación como los actores pronto comenzaron a notar ciertas "discrepancias" en la arquitectura del castillo. Paredes inquietas, ventanas obturadas como por arte de magia, pasos en sitios donde no había nadie, y toda una serie de escalofriantes rumores se apoderaron del set.
Hasta aquí no nay nada que no pueda hallarse en un castillo abandonado, es decir, cuestiones ligadas a la sujestión lógica de un lugar en donde se produjeron hechos siniestros. Pero estos testimonios luego serían avalados por una serie de estudios en los que se probó que el castillo de Elizabeth Bathory, acaso luego de su reclusión, fue modificado en algunos sectores con muros deslizantes y ventanas que cambiaban su morfología, permitiéndole a la condesa sangrienta salir de los aposentos que le servían de prisión.
Los rumores crecieron cuando un grupo de actores y extras, gitanos y zíngaros en su mayoría, declaró haber visto la silueta fantasmagórica de una mujer flotando sobre las frías losas de los pasillos, con el rostro lívido y una boca descoyuntada que parecía anunciar los horrores más negros del infierno.
No existen documentos fotográficos ni fílmicos de aquel suceso paranormal. Sólo nos queda el rostro tétrico de Max Schreck, actor que interpretó al conde Orlock en la película, quien, según se cree, basó su gestualidad de ultratumba en la visión de aquel innombrable espectro.
http://losotrosvampiros.blogspot.com
Suscribirse a:
Entradas (Atom)